Abiertas las puertas del I.E. Juan XXIII para recibir a todos los miembros de la Comunidad Educativa quienes junto a todo el talento humano que labora en esta institución educativa y en hermandad hacen posible el sostenimiento de la matrícula en el pedestal donde ha estado los últimos años.
Esto dice mucho, dadas las circunstancias que nos rodean a todos los venezolanos, en el cual cada día las calamidades recrudecen para empobrecer a un país rico en petróleo, que lejos de producir bienestar, encarece más el modus vivendi de todos en general.
Inspirados en el mantenimiento de la empresa privada, le estrechamos las manos y, las esperanzas las elevamos al cielo en la petición al Dios Todopoderoso que interceda ante todo cuanto ocurre para que mañana regrese la tranquilidad al país por quienes se marcharon y quienes nos quedamos.
Que la sonrisa y el abrazo de un nuevo año escolar nos regocije a todos los que laboramos en esta institución, para que la responsabilidad sea del tamaño del corazón y empuje a todos por igual en esfuerzo hacia lo que el país reclama.
Luis Hernández Estrella